No te acerques tanto
que me puedes besar,
que me puedes besar,
que mis brazos pueden rodear tu
cuello
Y podemos olvidar el ideal.
A veces me pierdo entre la
mascara y tu,
eres...
cual bomba que sea estallar,
cual bomba que sea estallar,
la carta que debajo la manga se esconde,
el secreto que se agarra de la comisura de los labios.
Y aunque con algo de rabia
empezamos la guerra haciendo el amor
de rojo sólo queda lo que pasa por las venas
de rojo sólo queda lo que pasa por las venas
pues son pocos los que anhelan comunión.
Vete,
pero vuelve
y cuéntame al oído cómo hacer revolución.
1 comentario:
Si bien es cierto que me encanta la palabra onomatopeya y las palabras onomatopéyicas debes de saber que no sé descifrar en pleno ese lenguaje :)
Publicar un comentario